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Resumen

Mientras el Rey Maximus gobernaba la tierra, la vida era buena en los cuatro continentes. El Cetro del Orden descansaba seguro en sus manos, manteniendo a raya a las fuerzas de la oscuridad que infestaban el mundo. Los niños eran felices. Los comerciantes prosperaban. La gente honesta se ganaba la vida honestamente. Y nadie se quejaba mucho.

Pero al otro lado de las aguas, Arech Dragonbreath, líder de las Legiones Oscuras, miraba con envidia la riqueza y el esplendor de los cuatro continentes. Con la ayuda de una gran magia, Arech se introdujo en los aposentos del rey Maximus y arrancó el cetro de las garras del rey dormido. A continuación, liberó sus fuerzas malignas, ordenando a sus secuaces y lugartenientes que se apoderaran de la tierra de la manera que quisieran (siempre que implicara considerables cantidades de dolor y terror). Arech se retiró a su nueva guarida en los cuatro continentes y esperó la segura resistencia del Rey Maximus. El Rey y sus fuerzas, sin embargo, no ofrecieron ninguna. Temiendo algún tipo de engaño, Arech miró en su cristal profético para ver lo que Maximus estaba haciendo. El cristal mostraba al Rey tumbado en la cama, con el rostro pálido y demacrado como la propia muerte.

Sobre el Rey se encontraba un joven y noble caballero con la fuerza y la determinación de un gran líder. El Rey estaba hablando. "Ven aquí", jadeó, "estoy débil y el aliento es un lujo. Por favor". Extendió su mano y el gran líder se acercó. "Debes restaurar mi reino. Yo también debo ser restaurado. Estoy atado a esta tierra y si ella muere, yo también. Mis días aquí están contados. Arech observó este intercambio y rápidamente enterró el Cetro en algún lugar de los cuatro continentes. Dibujó un mapa de su ubicación y luego lo desmenuzó en 25 pedazos. Le dio uno a cada uno de sus 16 nobles villanos, guardó uno para sí mismo, y los otros ocho los escondió con poderosos artefactos alrededor de los cuatro continentes.

Tu tiempo se acorta, líder. Tienes tu búsqueda y la última esperanza del Rey Maximus. Que los Espíritus del Orden te protejan en tu viaje. ¡Buena suerte!